La piel es el órgano más extenso del cuerpo humano, su estructura permite crear una barrera para proteger el organismo de los agentes externos, y aunque la apariencia de la piel constituye un tema físico, también demuestra aspectos importantes sobre la salud en general.
La falta de líquido, la sobreexposición solar o la prolongada estadía en lugares secos, puede causar lo que comúnmente llamamos piel seca o xerosis (término médico). Esta afección no discrimina edades, y además, puede aparecer en cualquier parte del cuerpo, aunque es más frecuente en los pies, brazos, manos y parte inferior de las piernas.
¿Qué puede causar la piel seca?
Las causas de la resequedad pueden ser diversas, no obstante, las más comunes son:
- La falta de humedad en el aire: como el aire frío y seco del invierno o el aire caliente y seco durante el verano o ambientes desérticos.
- Baños o duchas de agua caliente con frecuencia.
- Lavarse las manos con frecuencia.
- El uso de algunos productos de higiene: como jabones y detergentes.
- Algunos medicamentos.
- El envejecimiento: dado a que la piel se vuelve más delgada y disminuye la producción de aceite natural.
- Padecer de afecciones cutáneas: como eccema y psoriasis.
¿Cuáles son los síntomas de la piel reseca?
Dado a que la resequedad se produce por la falta de agua y aceite en la piel, los síntomas de esta afección son:
- Piel áspera
- Rigidez en la piel, sobretodo después del baño
- Descamación
- Picazón
- Grietas que pueden sangrar
¿Qué hacer para cuidar la piel reseca?
La resequedad significa falta de hidratación, en este sentido, con estos consejos podrás aliviar la piel seca:
- Beba abundante agua.
- Aplica cremas o lociones hidratantes preferiblemente luego del baño, a fin de crear una barrera que evite que escape la humedad. Seque la zona con ligeras palmaditas y coloque el producto en la piel.
- Evita usar cosméticos y jabones que contengan alcohol, colorantes y otros químicos.
- Reemplaza los baños con agua caliente, por duchas cortas (máximo de 10 minutos) con agua tibia.
- De ser posible báñese 1 sola vez al día.
- Sustituya los jabones normales por limpiadores cutáneos o con humectantes agregados.
- Trata de aplicar jabón solo en zonas como la cara, axilas, áreas genitales, manos y pies.
- Evita restregar la piel.
- Evita utilizar ropa con telas ásperas como la lana.
- Alivia la picazón colocando compresas frías en las zonas con irritación.
- Lava la ropa con detergentes sin colorantes y fragancias.
El sol y la piel reseca
La sobreexposición a los rayos UV es una de las causas más comunes de la piel reseca, además, puede acelerar el envejecimiento cutáneo y producir la aparición de quemaduras, en este sentido, es importante proteger la piel de los intensos rayos del sol, utilizando ropa y prendas protectoras, filtro solar y de ser posible, evitar salir al aire libre cuando los rayos del sol están más intensos.
Aunque las molestias de la xerosis o piel seca pueden ser tratadas en casa, no dudes en consultar a tu médico si sientes excesiva picazón, mucha resequedad, heridas abiertas por rascarse o si los cuidados en casa no alivian la sequedad de la piel.